La palabra "Alfa" es una palabra a veces comúnmente utilizada en el argot de los dueños de mascotas perrunas.
Algunas veces, visitando algunos parques, pipicans o lugares donde me encuentro con otros dueños, puedo observar en algunas de sus conversaciones la famosa frase: "Es que mi perro es un Alfa", justificando muchas conductas no deseadas de su lindo perrito en el parque. E incluso minimizando: "No, es que es un poquito Alfa", como si lo de Alfa fuera algo que se adquiere a tiempo parcial.
Pero, ¿realmente sabemos el significado de un Alfa en una manada? ¿O bien lo confundimos con dominancia, o que nuestro perro no sabe gestionar su comunicación ni interpretarla con el resto por una pobre socialización temprana con sus congéneres y expresa una dominancia falsa que es miedo, timidez e inmadurez?
Vamos a analizar para destruir mitos qué significa la palabra Alfa dentro del Canis lupus familiaris, o perro doméstico.
Alfa, etimológicamente, viene del griego, donde su significado es "primera", "primaria" o "principal". Dentro de los grupos de manadas de lobos (Canis lupus), el padre de nuestro querido perrito doméstico (Canis lupus familiaris), la naturaleza les dio un orden estructural jerárquico.
Quiere decir que siempre hay un macho y una hembra reproductores. A estos se les asigna la palabra Alfa, y solo ellos, dentro de la estructura jerárquica, serán los únicos con derecho a reproducirse. Solo ellos y nadie más dentro del grupo podrá aparearse por debajo.
Salvo cuando los descendientes de los Alfas dejen el grupo y creen su propia manada futura ya siendo adultos.
Bien, una vez sabemos que estos reproductores Alfas (macho y hembra) son el principal sostén del grupo, tenemos debajo de la estructura a unos subordinados que son los Omega, de estos algunos aspirantes a futuros Alfas, y por debajo de estos los Beta.
Pero podríamos preguntarnos: ¿cuál es la principal función de esta estructura jerárquica?
Pues principalmente, la magnífica inteligencia de la naturaleza no deja nada al azar, y es la principal supervivencia del grupo.
Como un gran sistema inteligente, cada uno ocupa un lugar y toma su rol, siempre sabiendo que no se puede invadir el terreno y el estatus del otro. Un "Alfa" o "reproductor", como también me gusta llamarlo, no es un individuo déspota que lleva todo el día gruñendo al resto, robando la comida e imponiendo una ley de tirania.
Todo lo contrario, un Alfa reproductor tiene una energía muy equilibrada, mantiene un equilibrio en todo momento, es el ejemplo a seguir, come y deja al resto comer cuando él lo ha decidido, calma a la manada con su energía apaciguadora y firme, imprime el liderazgo, no busca el conflicto por defecto, salvo que se le rete o se le quiera tomar su puesto.
En definitiva, un Alfa es el ejemplo a seguir de inteligencia, equilibrio y estatus dentro del grupo. Sin estas figuras principales referenciales, el resto de individuos no tendrían referentes, ni a quién seguir, ni a quién respetar, por lo tanto, tendríamos a individuos frustrados sin un "let motiv" en sus vidas.
Y nos preguntaremos: ¿pero si mi perrito no es un lobo? ¿Vivo en un apartamento en la quinta planta en pleno centro, alejado de toda manada, de todo grupo social, viviemos solo el y yo??
Pues déjame decirte que científicamente, todos, todos son descendientes y son una subespecie del lobo. Por lo tanto, todos, todos, caniches, pincher, malinois, chihuahuas, schnauzer, labradores, dóberman, cocker, dálmatas... y todas las razas creadas por el hombre son una sub-especie de lobo.
Eso sí, troquelada por el hombre desde sus inicios, pero con una herencia genética de sus abuelos lobos y con una necesidad de jerarquía y estructura dentro del grupo. ¡Igual, exactamente igual!
Por lo tanto, si tienes un perro recién adoptado, un cachorro que se ha transformado en un adulto y ves que no ya te respeta, ves que te invade los espacios, notas que quiere dominar todo escenario, te roba la comida, te dice que el sofá es suyo, a pesar de que vienen invitados, posiblemente tienes a un Alfa latente que está demandando su lugar, y tú como líder principal en el núcleo familiar debes exigirle que te respete y te tenga como la principal figura a respetar.
Un perro que te respeta y muestra sumisión, siempre se pone panza arriba, y ladea su cuerpo, intentando lamerte. Observa su corporalidad, agacha las orejas, no te reta, no mantiene los belfos levantados no te gruñe.
Recuerda, si tú no le dices quién toma la posición en el orden jerárquico, sin ser un tirano, siempre, él tomará por propia decisión su dominio del territorio.
Repito, la mayoría de problemas de dueños y sus perros son la deficiencia de liderazgo con sus perros, existe un desequilibrio, y que muchos de dueños no pueden verlo.
Les dan muchísimo amor y todas las chuches del mundo, pero no les ofrecen una energía de líder, una energía firme, no ponen límites, y al querido peludo le suena una cancioncilla en su tremendo intelecto de: "Cariño, cómo te quiero, y cuánto voy a dejar que hagas lo que quieras conmigo". Recordemos , papis y mamis tenemos que serlo, pero sobre todo primero líderes, firmes y equilibrados y sin olvidar las líneas rojas, después podremos ser todo lo amorosos que queramos. Y eso es lo que añoran nuestros perr@s.
También quiero poner énfasis en los perros inmaduros, emocionalmente inválidos, perros con miedos, perros agresivos. Perros que no saben jugar ni respetar los tiempos, como dije anteriormente, con una pobre o nula socialización temprana.
Pues bien, si tu perro ladra a todos, con correa o sin correa, si no deja jugar a nadie, si reclama todo el rato su espacio, si juega invadiendo al otro todo el rato sin respetar los rituales naturales de interacción canina de sumision, reverencias y respetando las distancias en el juego. Lo siento, tu perro ni es dominante ni es un Alfa, tu perro es un inadaptado social y tanto tú como él necesitáis la ayuda de un profesional canino solucionar todos esos escenarios de conductas no deseadas. Lo siento, alguien debía decirlo.
Y aquí soy un poco drástico y crítico con todos los dueños que creen saber lo que es mejor para sus perros y los han abandonado a una etiqueta eterna humana de: "Mi perro es dominante, y un poco Alfa".
No nos demos por completos aprendidos, dejemos que entre la nueva información en nuestras vidas, no construyamos muros mentales, y dejemos que la tremenda sabiduría del resto y los que realmente saben.
Por el bien de la manada y su equilibrio.
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